Crítica de INSOMNIO, Ne me Quitte pas el Sueño en la revista LATEATRAL
INSOMNIO, Ne me Quitte pas el Sueño de bricAbrac Teatro abría temporada en la Sala La Fundición con un espectáculo para no dormir, de la risa.
A la pregunta de cuánto me quieres, Elena Bolaños responde en metros. Más que Elena, lo hace Irene, el personaje que interpreta en la última comedia de la sevillana bricAbrac Teatro. La compañía ,recupera a la niña que a los 9 años tuvo su primera crisis de identidad en ‘C’est la Vie’, el primer espectáculo de la compañía, aunque ahora ya es mayorcita. Recién cumplidos los 30 años, llegada de la boda de una amiga y en un piso que le recuerda al novio que la ha abandonado y a la madre, que eso ya lo sabía. Aparentemente el argumento no brilla por su originalidad, pero acaba brillando, y mucho.
Resulta imposible despegar los ojos de Irene, que desde el primer momento convierte al público en su cómplice. Una cercanía invisible que logra con una dosis de humor continua y un ritmo que no decae, que sorprende hasta el final. Parece que está contagiando el “Insomnio”, pero a carcajadas.