Crítica de INSOMNIO, Ne me Quitte pas el Sueño en AforoLibre
La obra oscila entre dos mundos: el real y el imaginario, el “soy” y el “si yo fuera”. Irene ya no existe, se convierte en Jennifer, personaje de la novela que siempre ha querido escribir. En “Insomnio” cualquier cosa puede ocurrir, todo es fantasía, hasta el color azul de los muebles y del vestuario. Durante casi una hora y media de risa y de buen humor, con un ritmo frenético que se mantiene y sorprende hasta el final, Elena Bolaños, gesticula, hace gimnasia, malabarismo, baila con el maniquí, canta, es incansable y maravillosa. Da la impresión de que nos está contagiando el “Insomnio”, pero riéndonos a carcajadas.